viernes, 9 de octubre de 2020

"¿DE DONDE?: EL ASCUA "PA" MI SARDINA"





POR LOS QUE YA NO ESTÁN


Nací y vivo en Valdemorillo desde siempre, pero con tristeza observo que cada día que pasa el pueblo tiene menos vida y cada vez hay más negocios cerrados ¿de quién es la culpa? ¿nuestra? hacia dónde vamos alcaldes deshaciendo lo que estaba en proyecto por si no lo podían controlar, 35 años para hacer un plan y hoy no está hecho ¿cómo va haber progreso? vecinos que viven en urbanizaciones se quejan, pero no se integran y colaboran en su gran mayoría, no somos capaces ni de arrimar el ascua “pa” mi sardina, estamos perdiendo el tren, esto es “entre todos la mataron y ella sola se murió”.

 

Esto he recibido. Parece claro, que este amigo, se lamenta de la situación que se vive, se siente y se padece, desde hace bastante tiempo en Valdemorillo.

Cuando hablamos de integración de las urbanizaciones en el Pueblo, habría que definir, antes de nada, que es lo que se entiende por integración. Por ejemplo:

.. Yo me siento bastante integrado en el Pueblo, vivo en mojadillas desde el 92, pero empecé a venir en el setenta y tres, a la finca de Felix Polus que en paz descanse, junto al rio Perales, asisto a los plenos, los critico, tomo algún que otro vino con los amigos, compro aquí casi todo, me atienden en el Centro de Salud y visito la Casa de Cultura bastante, pertenezco a la Tertulia literaria La Fuente. No cuento este tiempo de “corona-virus”, tan excelentemente bien gestionado por nuestros ilustres gobernantes de las santas izquierdas, con la mejor colección de ministros que recuerda la Historia, que muchos votaron para su desgracia y la nuestra. Realmente me siento INTEGRADO, tanto y más que muchos de los que viven en el “casco”.

.. Más de la mitad de los empadronados vivimos en urbanizaciones. Somos, en su mayoría, gente que tiene o ha tenido su trabajo en Madrid o alrededores, salimos pronto de casa y volvemos tarde y los días que no hay trabajo, nos gusta disfrutar del relajo que nos da el campo y, unos más que otros, disfrutamos de la compañía de los amigos que viven en el “casco”, sean o no de Valdemorillo.

.. No siente, este amigo que me escribe, más tristeza que yo por su pueblo, a su pena, muchos tenemos que añadir el olvido, por decirlo fino, más absoluto en que nos tienen las diferentes Corporaciones que nos han gobernado. Año y medio va de legislatura y, este servidor vuestro, no ha notado más cambio que el de las personas que ahora tienen nuestro destino en sus manos. Sería un cínico, si no reconociera que han movido alguna ficha, en lo que a mí se refiere, también es verdad que sin resultado alguno. Quizás lo vea en un momento, ¡Ojalá, pueda retirar esto más pronto que tarde!   

.. ¿De quién es la culpa? Se pregunta mi amigo. Más de uno dirá que es de los que vivimos en las urbanizaciones. Teniendo en cuenta que una buena parte, del personal, pasa olímpicamente de todo lo relacionado con la política de cualquier tipo y nivel, y que nos tragamos lo que nos echen sin piarlas, es fácil entender que el Ayuntamiento nos tenga en poca consideración.  

.. ¿A cuantos políticos hemos oído en sus campañas que las urbanizaciones debieran ser como barrios del Pueblo? Yo, a todos los que han pasado por aquí. Luego, una vez que ocupan el poder, parece que les fallara la memoria. Cualquiera puede entender que este Equipo de Gobierno lo tiene complicado al gobernar en minoría. ¡Qué Oposición! ¡Edificante, totalmente edificante! Si no os lo creéis, acudid a cualquier pleno y os daréis cuenta del porqué las cosas van como van.

.. Amigo, no nos eches la culpa a los vecinos. Votamos lo que mejor nos parece del menú. Lamentablemente el restaurante no tiene una estrella Michelin.

¡Ah! Si yo fuera Alcalde… Entonces, mía sería la culpa. Ahora, solo del silencio soy culpable.

Pasadlo bien. Andrés

 

Y tú, NICANOR ¿Qué dices?

  PUÉS… ¡QUÉ ME SAQUES A LA CALLE, COÑO! ¡QUE ME TIENES “CONFINAO” Y ASÍ NO SE PUEDE HACER NADA! ¿QUÉ QUIERES? ¡Y CORRE LA VOZ! DE PASO PROTESTAMOS CONTRA DON PEDRO Y DON PABLO, QUE SE NOS HAN SUBIDO A LA CHEPA.

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