PENSAMIENTOS Y ZARANDAJAS (2 de 2)

(Continuación)

Después de pensar bastante sobre este hecho y después de discutir y charlar con los amigos llego a dos o tres conclusiones sobre el particular:

Primera conclusión: Cuando alguien compra una parcela con la intención de venir a vivir aquí, sabe que tiene que pagar una cuota y punto, no se le pasa por la cabeza que tiene que preocuparse de la depuradora, las zonas verdes,… que tiene que pelearse con los que no pagan, con el Ayuntamiento para funcione, con el Canal de Isabel II, con la Confederación Hidrográfica correspondiente por los vertidos de las depuradoras,… Todo el mundo entiende que se depende del Ayuntamiento donde uno reside, pero a nadie se le ocurre pensar que la afirmación, que se refleja en el Artículo primero de los Estatutos, hablo de Mojadillas, que dice “…la urbanización funcionará bajo el control del Ayuntamiento de Valdemorillo” no se cumpla. En mi opinión el Ayuntamiento no controla ni siquiera lo que podría aumentar sus ingresos. Hasta pone sanciones que luego "SE OLVIDA" se olvida de cobrar.

Segunda conclusión: La mayoría de los Presidentes de urbanizaciones no están preparados para serlo. Las complicaciones inherentes del cargo implican una cierta formación administrativa  y conocimientos sobre el funcionamiento de los Ayuntamientos, sus reglamentos, sus ordenanzas,… Por esto puedo entender a Doña Pilar cuando dice que “no hacemos los deberes”. El Ayuntamiento, en vez de educarnos y formarnos en los asuntos que nos conciernen a todos y que luego tiene que controlar, hace todo lo contrario, se llama “andanas”, hoy nos dice blanco y mañana negro, juega con nosotros a sabiendas de que el Presidente de hoy, mañana no va a estar y al que venga ya le tocará el turno de ser toreado,… A lo mejor yo soy muy susceptible y un mal pensado, pero esto que escribo es lo que siento y creo que es lo que he vivido y vivo. Me duele expresarme así porque siento un gran afecto por muchas de las personas que trabajan en esa casa de piedra, que tenemos en la Plaza de la Constitución, que tiene nuestra bandera y se llama Ayuntamiento.

Tercera conclusión: He sido Presidente de Mojadillas ocho años, cuatro Vice-Presidente, he sido Presidente de URVA y he visto como más de un Presidente considera su urbanización como un reino de Taifas, he visto como se prefiere “defender” una migaja para su urbanización en vez de trabajar por el bien de todas. Esta circunstancia la maneja el Ayuntamiento “da bute” que diría el “Cheli”. Por cierto, al final de mi permanencia en la Junta me tiraron por la ventana de mala manera, con alguna razón, un tal JC que llevaba las cuentas sacó del banco lo que quiso sin que se dieran cuenta los que tenían firma. Es lo mismo, otros muchos trabajaron desinteresadamente para su urbanización y les pasó lo mismo. En este sentido, esto me hace concluir que hay un tanto por ciento muy alto de vecinos, que no se merecen ni agua, por lo menos gratis. Que algunos “voluntarios” nos sintamos mal por esto, no está bien, pero puede entenderse. Se asimila peor que los políticos, que cobran, lo hagan mal o miren para otro lado y no quieran enterarse o se cierren en banda y no quieran acometer asuntos que solo ellos, con el poder que les hemos dado, pueden resolver.

Estas conclusiones justifican, a mi modo de ver, que sea imposible formar un grupo que pueda tener peso en el Ejecutivo del Ayuntamiento. En estos meses se oye hablar de la creación de un posible grupo político con este fin. Pienso que sería totalmente razonable, siempre lo fue, y en estos días, que está el personal “cabreado”, hasta es posible que tuviera más éxito que en otras ocasiones. Ni se me pasa por la cabeza que ese grupo solo mirase por las urbanizaciones, es más, tendría la obligación de integrarnos de una vez en el PUEBLO y lo pongo con mayúsculas porque estoy convencido que hasta que esto no se consiga, este municipio será una castañita.

Sigo preguntándome: ¿Por qué el Ayuntamiento no hace un PROTOCOLO de integración de las urbanizaciones con el Pueblo? Uno oye de todo: No quieren que nos integremos, no saben, no quieren trabajar, no pueden, no tienen dinero para hacerlo,…

Cualquiera de estas opiniones implica y se resume en una sola: NO HAY VOLUNTAD POLÍTICA de hacerlo, ni siquiera de intentarlo. Esto me parece grave, muy grave.

Si ahora ocurre esto ¿Qué ocurrirá cuando la nueva reorganización de las Administraciones Públicas cobre la mitad de lo que se les paga ahora? ¿A lo mejor son los funcionarios los que no funcionan y son ellos los que tienen la culpa? De todo hay en la viña del Señor.

Pasadlo bien. Andrés