El domingo
estuve en la feria con los nietos y subí a lo más alto con uno de ellos, casi me da un pasmo. A pesar de
ello hice una foto para vosotros. ¡Qué mareo!
Esta mañana me
he acercado a la Misa de San Blas. Misa concelebrada, como corresponde a un
Santo Patrón, con tres sacerdotes de
pueblos de alrededor y con ellos, no podía faltar, Don Ulpiano, que acompañaron
a Don Pablo y Don Marcelino.
Lo primero que
me he encontrado es una entrada a la Iglesia transparente, cristal y madera,
una invitación a entrar y disfrutar de una nueva luz, inesperada y que la
ilumina toda: Las piedras, los cuadros el retablo y hasta San Blas, que a pesar
de lo pequeño, me pareció más majo, tanto, que no pude resistirme a llevarlo un
rato por la calle Balconcillos.
Mi enhorabuena al
que tuvo la idea y al carpintero.
Celebrada la
Misa, por cierto, con himno nacional y todo, el paseo obligado hasta la
Candelaria, una visita al museo taurino y un piscolabis muy bien puesto, lo
repito, muy bien puesto, con refrescos y limonada para pasar lo puesto.
Como es
costumbre, los gigantes y cabezudos van delante en el desfile de autoridades y
pueblo y no faltó la banda que nos acompañó todo el rato, fuera y dentro de la
plaza.
Gracias amigos por
vuestro afán y buen hacer.
Por la tarde
la procesión con San Blás.
Hace unos
cincuenta años tuve la oportunidad, con mis dos hermanos y mi padre, de llevar
a San Bartolo, Patrón de Navalmoral de Bejar. Una emoción encontrada y revivida
que me será difícil olvidar y que he de agradecer a un paisano de Valdemorillo,
que ya peina canas y me tiene por amigo.
Sentía por esa calle, el ligero peso del santo y seguramente, por ser como es la
calle, recuerdos de otros tiempos que viví
en mi juventud y una tristeza grande, molesta y dura, por unos tiempos nuevos
que amenazan romper lo ya creado y volver a no sé dónde. Espero que San Blás y
San Bartolo se junten y lo impidan. Yo estaré con ellos y también sé que otros
muchos.
Y como nos ha dicho Don Pablo "que siga la fiesta y vámonos con la música a otra parte."
Pasadlo bien. Andrés
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