CIUDADES INTELIGENTES

Ayer, sábado, 8 de octubre de 2016, a las siete de la tarde, Francisco García Ahumada, tuvo el detalle de deleitarnos, una vez más con una charla, esta vez sobre CIUDADES INTELIGENTES, en el Salón de Plenos Ordinarios del Ayuntamiento de Valdemorillo.

CADA VEZ MÁS SECO

Está claro, que, esto no es una muestra de una CIUDAD INTELIGENTE, es la acacia que se cayó con la ventolera y que no ve el Presidente de Mojadillas, ni el responsable en la Junta Directiva del mantenimiento de la Urbanización, ni la Aparejadora del Ayuntamiento, ni la Policía, ni Luis Hernández y mucho menos la Señora Cámara, que ya se ha aprendió que esto no es cosa del Ayuntamiento, que es cosa de la Urbanización porque no está recepcionada. Esta foto solo demuestra la desidia de todos aquellos que, de alguna manera, debieran ser mis Mayores en GOBIERNO, porque en dignidad no me gana ninguno, ¿A ver, por qué no puedo yo fardar un poco? En edad, no sé si me gana el mayor de todos. Por cierto, he podido comprobar que la Policía trabaja en los aparcamientos de la Plaza de la Constitución. 

Esto es solo por poner una foto, pero vayamos a lo de las CIUDADES INTELIGENTES.

Comprendo que los Concejales del Ayuntamiento de Valdemorillo tengan su horario de trabajo, pero no puedo entender que la Concejal de Cultura Doña Encarnación Robles Vicaría no esté al tanto de los actos culturales que tienen lugar en el municipio. No digo que asista a todos, pero sí creo que debiera saber de aquellos que pueden ser interesantes para la buena gobernanza del municipio y así se lo hiciera saber a todos sus compañeros de Gobierno y, por qué no, de la Oposición.

Ayer sentí vergüenza ajena, ni uno solo de los diecinueve que se sientan en la mesa del Pleno estuvo presente, ni siquiera estos jóvenes, Concejales, que militan en ese partido que apoya a los asalta-capillas en semi-cueros, filo-etarras, matones, separatistas, comunistas,… que hablan de la PARTICIPACIÓN CIUDADANA, que también se habló de eso.

Luego, este que escribe se extraña de que seis de sus vecinos se apoderen de casi mil metros cuadrados de aparcamiento de uso público sin que el Ayuntamiento abra la boca. Debo estar imbécil.

Si sale el tema del CANAL, también me extraño de que algunos Presidentes intenten rebajar el coste del metro cúbico de agua, que a todas luces me parece excesivo, y prefieran ir al Juzgado antes que negociar y perder, cuándo yo prefiero pagar lo que se me exija por una Institución Pública, con tal de olvidarme del asunto y que sea la Administración la que me permita vivir sin tener que pelearme con mi Presidente o con los morosos o…

Supongo que la Arquitecta Municipal si sabe de qué va esto de las CIUDADES INTELIGENTES, seguro que lo ha estudiado. Estos dos temas que he comentado de pasada debieran ser el ABC de su trabajo diario, también el del resto de los funcionarios de primer y segundo nivel y, cómo no, de todos los Concejales, sean o no del Equipo de Gobierno y sepan o no leer.

No sé que es más duro: Si decir esto o tener que aguantarlo. Supongo que no os hace ni pizca de gracia que os lo diga este “pirao” de 72 años que asiste a todos los plenos y os da la tabarra de vez en cuando y al que, hoy por hoy, no le habéis podido quitar la razón ninguno de los diecinueve, perdón de los veinte, me olvidaba de la Señora Aparejadora.

No puedo pasar por alto algo acerca de la PARTICIPACIÓN CIUDADANA. Parece que esta es una condición inherente a una CIUDAD INTELIGENTE. Ahora bien, creo que la participación de una ciudadanía que no sabe hacer la “o” con un canuto, o que no tiene interés ninguno por nada y que prefiere que se lo den todo hecho no tiene mucho sentido y, lo que es peor, de una ciudadanía que tiene miedo a decir lo que piensa porque el Ayuntamiento puede hacerle la puñeta. No os extrañéis, me lo dicen en la cara, es más, me dicen que me calle, que no voy a conseguir nada. Creo que no estoy de acuerdo con esa participación ciudadana.

Cuando alguien con una experiencia infinita, con participación en proyectos de carácter internacional, quiere trasmitir algo al Alcalde de un Pueblo y, de una forma u otra, esos Alcaldes le dan largas, no tienen perdón de Dios.

Y ASÍ NOS VA Y EL QUE QUIERA QUE SE LO APUNTE.

¿Cómo era aquello? ¡Ah!… HE DICHO

Seguiré comentando cosas de esta charla, con permiso de Don Francisco, por qué el tema tiene miga, mucha miga, tanta que a lo peor no soy capaz.

Pasadlo bien. Andrés