SEIS MARCHAS POR LA DIGNIDAD

Entiendo que hay motivos y razones básicas para formar estas seis marchas y seguramente para otras tantas. Lo que no entiendo es a algunos de sus promotores.

Entiendo que son marchas organizadas por IU y el PSOE, estos un poco más camuflados. No les entiendo a ninguno y mucho menos desde que algunas de las personas, que yo he considerado defensores de sus ideologías, coinciden conmigo en que el PSOE ha perdido el norte.  

Entiendo que la situación se les haga cada día más insoportable, a mi también, pero ¿Porque protestan contra este Gobierno? ¿Por qué no protestaron contra Zapatero? ¿Por qué esos dirigentes que manejan esas marchas se mantuvieron callados con los Gobiernos del PSOE? No lo entiendo.

Este Gobierno del PP hace cosas que a mí no me gustan y no me van a tapar la boca. A pesar de ello seguiré votándoles. A santo de que el Señor Rubalcaba o la señora Valenciano dicen las cosas que dicen. Si hubieran tenido dos dedos de frente hubieran corregido todo lo que ahora están criticando antes de meternos en este infierno. Tienen el valor de seguir hablando y de pedirles a los que están ahora que, en dos años, reparen todo los que ellos hicieron mal en los ocho años que ellos estuvieron mandando.

Sinceramente ¿Alguien se ha creído lo que decía en la campaña electoral el PP, aquello de no subirnos los impuestos, alguien creía que lo iban a cumplir? El que se lo creyera, en mi opinión, era bien torpe. Otra cosa es que, sabiendo que eso no lo iban a cumplir, pensara que harían otras cosas o que lo harían de otra manera.

A los que ahora mismo dudan del PP, yo entre ellos, les pregunto ¿Qué hubiera pasado si hubiera ganado el PSOE? No quiero ni pensarlo.

¿Qué quieren los dirigentes o los organizadores de estas seis marchas? La mayoría de los que caminan piden trabajo, piden sueldos dignos, piden techo, piden sanidad, piden menos impuestos, piden que no se pague la deuda… y no sé cuantas más.

Lo de no pagar la deuda me parece demencial.

Pero, vamos a ver, si yo no puedo pagar más de 100 euros para que me poden las arizónicas, una de dos: o hay alguien que me las poda por ese dinero, o las podo yo, o se quedan sin podar. ¿Alguien puede pedirme que pague 120 y obligarme a podarlas?

Este ejemplo es muy tonto, otros pueden ser más complicados, por ejemplo: Una empresa ha ganado en el año 1000 millones de euros fuera de impuestos. Uno puede preguntarse ¿Por qué se le permite que se guarde tanto dinero? Podríamos decir: Que pague 500 mil de impuestos. Yo no sé muy bien que decir. Supongo que ese dineral servirá para pagar a los señores que han invertido en la empresa. No sé qué % de lo invertido les corresponde a los inversores, ni sé qué cantidad han dedicado o van a dedicar a nuevas inversiones o a renovar la empresa o a investigación. Nunca he tenido acciones, siempre me pareció un juego de casino y una vez que le hice caso al banco, lo que invertí durante cuatro años no me produjo nada y tengo que dar gracias porque recuperé lo invertido.

No me parece fácil decir o calcular lo que deben pagar, de impuestos añadidos, las empresas en función de lo que ganan. Sin embargo, si estaría dispuesto a fijar un tope máximo para pagar el riesgo del señor que invierte. Entonces surge la otra pregunta ¿Qué pasa si se pierde dinero en esa inversión? El comentario más corriente entre los trabajadores, siempre es el mismo: “Las que se van por las que se vienen”. Con esa filosofía ¿ Quien se va a convertir en empresario? Por increíble que parezca todavía los hay. ¡Bien por ellos!

Queridos amigos que venís en las marchas por la dignidad, estoy con vosotros, pero estoy convencido de que los que os han organizado, desde el Señor Gordillo a los otros cuyos nombres ni me suenan, solo buscan mantener su silla, es decir su sueldo.

Señor Rajoy, la gente está harta de tanto sinvergüenza, tiene usted una oportunidad de oro para regenerar la política nacional y España en general. Si eso le cuesta alguna cabeza de los suyos, no lo dude, córtelas y si al final tiene que cortar la suya también, no lo dude, España entera se lo agradecerá. Yo estoy con usted.

Pasadlo bien. Andrés