No ha
mucho que hemos tenido en la Tertulia Literaria La Fuente una charla que me ha
dado que pensar.
Heidi,
nuestra alemanita preferida nos habló sobre Ética Mundial. La preparó a
conciencia, bien documentada y muy estructurada. A mí me gustó y disfruté con
ella. Nos cuenta sobre las conclusiones a las que llegan unos cuantos pensadores
y estudiosos del tema. Por resumir, tal como yo lo entendí, alcanzan una
especie de consenso en el que escriben una especie de decálogo al que debía ajustarse
la Ética Mundial, algo así como los diez mandamientos. Ese decálogo resume las
ideas de los diferentes pensadores y de las diferentes religiones. De repente
nos cuenta que, en ese decálogo, se excluye específicamente el aborto y la
eutanasia, temas que cada país debe solucionar por su cuenta.
La
verdad es que me quedé como tres con dos ojos. No pude por menos que preguntar ya que, a mí, me parecen dos temas importantes y una Ética que no tenga en cuenta
estos asuntos me parece que ni es Ética ni nada.
Alguien
me aclaró: No se incluyen porque no se ponen de acuerdo en ninguno de los dos
temas.
Así
pues, según mi criterio, cada uno tiene su ética, que normalmente ajusta a sus
intereses, esto permite a los políticos hacer lo que se les ocurre, eso sí,
siempre ajustados a su Ética y por el bien del Pueblo y si no coincide con el
bien del Pueblo que se le va a hacer.
Así las
cosas ¿Por qué razón mis vecinos van a devolver los aparcamientos de uso
público que han ocupado? ¿Ocupado? No, robado con el beneplácito del
Ayuntamiento ¿Verdad, Doña Pilar? Y eso que usted juró, no se conformó con
prometer, juró cumplir y hacer cumplir la Constitución. Queda claro que su
Ética le permite saltarse a la torera, nunca mejor dicho, su juramento; mis
vecinos, al menos, no juraron. Sus Éticas les permite a todos los involucrados
hacer esto y dormir tranquilamente y la mía me obliga a darle, a unos y a otros,
toda la caña que pueda. Procuraré no amargarme por un tema tan estúpido y
mezquino como este. Estúpido, porque lo es y mezquino porque así lo quieren mis
vecinos y los que manejan el Ayuntamiento y digo manejan porque esto no es
gestionar. Espero que se lo apunten todos los que se sientan en la mesa del
Pleno y los funcionarios de primer nivel. Los demás, lo siento por ellos, no sé
si pueden hacer algo más que obedecer.
¿Y por
qué no van a hacer lo que les venga en gana? Si desde el etarra más asesino al
Señor Mas, salvando las distancias y cada uno en su juego, los Presidentes de
las cajas, los políticos corruptos y todo “vicho viviente” se “cachondea” de
nuestras Leyes, de nuestra Constitución y del poder del Estado. Señor Rajoy
¡Espabile! Que ya solo falta que esa panda, que no ha estudiado ni la LOSE, ni
la Educación para la Ciudadanía ¿O sí? Se dedique a dejarnos sin Policías.
Así lo
pienso y así lo escribo.
Dedicaré
otro rato a la Semana de la Mujer y al aborto.
Pasadlo
bien. Andrés
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