¡Qué brutos! Como me la
han dejado, casi ni la conozco. ¡Doce contra una, ya podrán!
Tengo la impresión de
qué las sardinas no quedaron cocinadas, no había calor para tanto. Tampoco hay
pastel. La diversidad está muy bien si no nos jugamos el pan. Tenía razón Alfonso
Guerra cuando afirmaba de España “No la va a conocer ni la madre que la parió”, o algo
parecido. Parece que está empezando a tener razón.
De “Una España Grande y Libre”
a “no se sabe dónde”. Se oyen tantas cosas estos días sobre los pactos, que
parece que España entera se ha convertido en un nido de grillos. Me caen bien
los grillos, mejor digo de chicharras.
De doce parece que se
quedan ocho. Un bonito número para hacer juegos malabares. Oigo que ya han
acordado quien nos gobernará en Valdemorillo los próximos cuatro años. Siendo
los que más concejales han sacado, parece que el PP se queda fuera. La
legislación actual permite que se formen pactos para que esto suceda, aunque
sea contra natura. A parte de que me duela, no lo entiendo.
¿Cómo es posible que,
después de más de treinta años de democracia, sigamos siendo tan torpes? ¿Por
qué no aprendemos de los que saben? ¿Para qué han servido tantos asesores a los
Gobiernos de turno? Estos pactos no los hacen los votantes, los hacen señores
que se arrogan un poder que no les pertenece. Soy partidario de una segunda
vuelta en la que son los votantes los que deciden quién debe gobernar. Esto que
se hace ahora, por muy legal que sea, me parece un mercadeo absurdo y sin
sentido.
Hay quién dice que los
pueblos tienen los representantes que se merecen. No estoy de acuerdo, ni
siquiera al reconocer que salen del Pueblo. Pienso que todo esto es producto de
la mala educación que nos han dado.
Más de una vez he dicho
que España es más bien de izquierdas, estas elecciones lo que me dicen es que
es más bien de muy izquierdas. No entiendo como sabiendo todo el mundo, casi
todo el mundo, que la virtud está en el centro, ahora haya pactos con pro
etarras o independentistas o similares.
Nos tenemos bien
merecido lo que nos pase, por torpes. Aquí ya tuvimos un tripartito, me parece
que ahora son cinco o seis y vimos lo que pasó. ¡Tiene bemoles!
A pesar de todo, espero
que la nueva Corporación arregle los problemas de Valdemorillo como las
ilegalidades urbanísticas, el tema del agua, las depuradoras, la recepción de
urbanizaciones,… y este de Mojadillas.
NOTA: No se olvide ninguno
de los que han pasado por la Mesa del Pleno y tampoco los que vengan, que en
Mojadillas, en la calle Flor de los Almendros números 7, 9, 11, 13, 15, 17, 19
y 21 hay aun aparcamiento público, de casi mil metros cuadrados, cuyo uso y
disfrute el Ayuntamiento de Valdemorillo y la EUCC Mojadillas “regalan”, única
y exclusivamente, a los propietarios de las parcelas citadas.
Pasadlo bien.
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