IMPUESTOS, JUSTICIA Y SUPERVIVENCIA

Creo que nunca estaremos de acuerdo en estos temas y difícilmente llegaremos a un cierto consenso.

IMPUESTOS.

Es cierto que hay un criterio general en el que se coincide, me atrevería a decir que todos: EL QUE MÁS TENGA, QUE MÁS PAGUE. Sin embargo, los grandes capitales o empresarios saben de artimañas legales y, a veces, no tan legales que les permiten evadir una buena parte de sus impuestos. Es verdad que en ocasiones invierten parte de sus ganancias en crear nuevas actividades, cuando esto es así, uno puede entender y admitir que eso que invierte en una nueva creación de riqueza, no se le penalice dos veces. Yo entiendo que alguien que crea puestos de trabajo no pague por haber conseguido dinero para crearlos y luego por crearlos, lo entiendo porque, lo queramos o no esos nuevos puestos de trabajo, o esa nueva industria generará nuevos impuestos que han de pagarse y a la larga eso será mejor para la sociedad, que haberle sacado más por su primer beneficio.

Se dice muchas veces que si se aprieta a los ricos para que paguen más, se largan. Estos casos son diferentes a lo comentado antes. Esto suele estar relacionado con el IRPF. Es esta escala la que tiene que ser muy fina en los tantos por ciento que se aplican. A veces olvidamos que si se le aplica un tanto por ciento, el tope, por ejemplo, a cualquiera que gane a partir de unos determinados ingresos, siempre pagará más el que más tenga. Es en este punto donde nuestros Señores de Hacienda deben afinar para que seamos competitivos con otros países y no se nos vayan estos mirlos blancos.

Algunos impuestos de razonables no tienen nada. Un ejemplo claro es el IBI que se subió en tiempos de bonanza y se mantiene en tiempos de penuria. Eso lo saben bien los Alcaldes de los pueblos ¿Verdad, Doña Pilar?

JUSTICIA.

A pesar de que hay quien dice que vivimos en un país en el que la Justicia funciona, aunque sea lenta, yo no me lo creo. Por seguir con lo que aplica a los impuestos, yo creo que en España los impuestos no están justamente aplicados y mucho menos justamente repartidos. No hay más que ver el Boletín de la Declaración de Hacienda para darse cuenta que, o has estudiado económicas o algo parecido, o eres un genio, o no serás capaz de cumplimentarlo. Seguramente lo hacen así para crear puestos de trabajo que paga el que no sabe de estas cosas. Como dice el refrán: En esta vida, al que es bobo lo espabilan. También vale el otro: Al que pregunta se llevan de calle. En mi opinión, el límite por debajo del cual no se paga es demasiado bajo.

La otra parte de los impuestos es su reparto. Protesta más gente por el mal reparto o la mala aplicación que se hace, que por lo que paga. Es que lo tiran, no llegaría la capacidad de este ordenador para mostrar lo que se ha tirado siempre, de lo tirado y robado en los últimos años ya no hace falta decir nada.

¿Qué sentido tiene que, en Valdemorillo, cobre lo mismo la Alcaldesa que la Vice-Alcaldesa? Sobran cantidad de asesores, enchufados, coches oficiales, prebendas, políticos, sindicalistas, concejales, subvenciones… Yo entiendo que si quitaran a todos los que sobran las listas del paro aumentarían en cerca de un millón de personas y esto sería difícil de soportar. Quizás debieran negociar sus sueldos y sus horas de trabajo para no despedir a nadie; a eso están obligando a las empresas.

SUPERVIVENCIA.

A esto nos han llevado unos y otros. Más los unos que los otros. Hay cosas que son difíciles de asimilar, por ejemplo cuando uno oye al Señor Rubalcaba y a sus compañeros de partido parece que esto que pasa es culpa del PP. No quiero ni pensar lo que hubiera pasado si hubiera ganado el PSOE otra vez. Cualquiera entiende que si has pedido un crédito para la compra de un coche o de la casa y te has ajustado demasiado, a la hora de pagarlo tienes que apretarte el cinturón, porque si fallas en los pagos se acabó lo que se daba. Aquí no se ha pedido un crédito para la casa, se han pedido millones para tirarlos en aeropuertos que no funcionan, grandes edificios públicos, comisiones, reestructuración bancaria, sueldos infinitos a magníficos gestores de Cajas que arruinan y ellos a forrarse, a maleantes que una vez condenados son indultados, autonomías malditas,… así, hasta el infinito.

¿Quizás el Ayuntamiento de Valdemorillo no tira las seis vallas de la calle Flor de los Almendros, ni nos envía los Estatutos, por esto de la supervivencia? Tendré que darle vueltas a esto.

Pasadlo bien. Andrés